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Las mascarillas en Hong Kong parecen estar a la moda, y hay muchas personas que las usan en la ciudad. Sin embargo, la razón por la que muchas personas usan mascarillas en Hong Kong se debe a las lecciones aprendidas durante los brotes de SARS y gripe aviar en la ciudad.
En una ciudad tan densamente poblada como Hong Kong, las enfermedades infecciosas tienden a propagarse rápidamente, como fue el caso con el SARS y la gripe aviar. Como resultado, los residentes de Hong Kong están, comprensiblemente, obsesionados con los gérmenes. Entonces, cuando los residentes de Hong Kong se resfrían o se enferman de la gripe, tienden a ponerse la mascarilla para detener la propagación de la enfermedad y en caso de que estén llevando algo más grave que un simple resfriado.
Otras medidas que encontrará en su lugar son el frotamiento regular de los botones de los ascensores y los pasamanos de las escaleras mecánicas y la búsqueda de dispensadores de desinfectantes en los vestíbulos de los edificios y en los principales centros comerciales de Hong Kong.
Estas medidas, especialmente las máscaras faciales, a veces pueden ser un poco alarmantes para los viajeros, pero solo hacen que Hong Kong sea más seguro contra las enfermedades. Si usted mismo encuentra que está sufriendo los resfriados, haga como los lugareños y póngase una máscara, que puede ser recogida en farmacias como Watsons, hospitales locales y algunos mostradores de recepción de centros comerciales.
Motivos de preocupación: enfermedades infecciosas y calidad del aire
Desde el brote de SARS de 2002 y el pánico de la gripe aviar de 2006, los residentes de Hong Kong han estado en alerta máxima por enfermedades infecciosas, lo que lleva a un mayor número de personas que usan mascarillas y toman otras medidas preventivas para prevenir la propagación de enfermedades en este ciudad densamente poblada.
Sin embargo, la tradición de ponerse estas máscaras tiene un origen incluso anterior en los países asiáticos, comenzando con el brote de influenza en 1918 que causó la muerte de 50 a 100 millones en todo el mundo después de infectar a más de 500 millones de personas. Como resultado, las personas comenzaron a cubrir sus rostros con bufandas, velos y máscaras para intentar detener la propagación de la enfermedad.
Una teoría alternativa de por qué estas máscaras crecieron en popularidad fue que el Gran Terremoto de Kanto de 1923 hizo que las cenizas y el humo llenaran el aire en Japón durante semanas, lo que provocó que los ciudadanos japoneses usaran estas máscaras para ayudarlos a respirar. Más tarde, cuando la Revolución Industrial provocó la contaminación del aire, especialmente en países de Asia oriental como China, India y Japón, la gente comenzó a usar máscaras diariamente para ayudarlos a respirar a través de la contaminación del aire, cada vez más tóxica.
La cultura de las mascarillas
Desde la Revolución Industrial, las mascarillas se han convertido en la norma en muchos países asiáticos, especialmente en los centros urbanos donde la contaminación del aire hace que sea más difícil respirar y los residentes temen constantemente la propagación de enfermedades infecciosas.
Afortunadamente, la mayoría de los residentes de Hong Kong no solo usan la típica mascarilla quirúrgica azul que se encuentra en la mayoría de los hospitales. En cambio, los vanguardistas de la moda de Hong Kong optan por ponerse máscaras personalizadas o diseñadas a medida, algunas de las cuales cuentan con filtros de aire especiales que eliminan las toxinas dañinas cuando respiran a través de ellas.
Todos, desde fabricantes de producción en serie hasta diseñadores de alta costura, ahora están entrando al mercado con estas máscaras de moda y útiles, por lo que si planea viajar a Hong Kong (o la mayoría de los países del este de Asia), considere visitar una tienda especializada y Comprando una linda máscara que va con tu atuendo.